Como tratar la fiebre, ¡el alivio es tu objetivo!
Es comprensible que los padres se preocupen cuando un niño tiene fiebre. En general, la fiebre es un síntoma de infección o de otra afección. La mayoría de las veces, la fiebre desaparece por sí sola en 2 ó 3 días.
Si el niño tiene fiebre pero juega, se alimenta y se comporta normalmente, es posible que no necesites hacer nada. Pero si se siente mal, deberías ayudarlo a que se sienta más cómodo.
Lo que debes hacer:
Revisa si la temperatura del niño persiste o se incrementa (38°C o más). Si esto ocurre consulta a tu médico.
El médico es la persona indicada para recomendarte el medicamento a utilizar.
Consejo: Si el niño está durmiendo, está cómodo. La mayoría de los pediatras recomiendan no despertar a un niño que está durmiendo para darle medicamentos que bajan la fiebre.
Otras medidas que puedes considerar:
- Frota levemente el cuerpo del niño con una esponja con agua tibia. No sigas si el niño comienza a tiritar.
- Mantén al niño fresco con ropas livianas y una temperatura ambiente más baja.
- Asegúrate de que el niño tome mucho líquido.
Cuándo hay que llamar al médico
- Tiene temperatura de 38.0°C o más alta y cualquiera de estos síntomas:
- Dolor de cabeza
- Dolor de garganta o de oídos
- Vómito o diarrea constantes
- Tortícolis
- Sarpullido extraño
- Apariencia de estar enfermo o muy somnoliento o molesto
- Ha estado en un lugar muy caliente (como un automóvil sobrecalentado)
- Tiene problemas subyacentes del sistema inmune o antecedentes de convulsiones.
Otras razones para llamar al médico:
- El niño parece empeorar, incluso luego de tomar medidas para que se siente mejor.
- Cuando tu hijo continúa con fiebre (38.0°C o más) por más de 24 horas.
Es importante tener ésta información a la mano